Francisco 1987

No!

 

En la melancolía de la risa

en los ahogos de los buzos

de altamar, ahí

está una verdad

 

Halcones sofisticados

juegan a asesinar hormigas

y el átomo gira más alto

cada vez

 

Los minutos han enloquecido

y el asco se ha convertido

en mueblería vieja

 

La vergüenza se pasea desnuda

por los calcañares y mecetas

donde las víboras lavan platos

y cortan carne

 

Los mercados ya no son lo mismo

sin los payasos

y doña Clodomira se está masturbando

con un palo de acero reforzado

 

No, no, no, no, no, no, no

hay que aprender ha decir no

cuando  es necesario

y tener carácter y saber hablar

cuando haya que hablar