El suave viento susurra un amor
pero las nubes presagian temor,
anduve por veredas de fantasía
con letras que hicieron travesía.
El bosque despierta ese aleteo
yo paso buscando a mi Romeo,
aquellas estrellas tiritan en pares
tras la bruma en lejanos lugares.
Se lleva la noche un verso sentido
todo se refleja un tanto aburrido,
la musa rebelde se da por aludida
y sabe que debe sanar una herida.
En la quietud del silencio respiro
se me escapa un profundo suspiro,
sin ningún motivo quizás aparente
me deja dormida, pasiva y doliente.
Busco despegar hacia otro destino
que trace la ruta del nuevo camino,
las hojas resecas se quedan atrás
cerrando la puerta del nunca jamás.
***Omaris Redman***
Julio 7, 2023