mariat araure

CAMINO POESFILICO. MORIR DE VIDA O VIVIR DE MUERTE

Una nueva versión de mí

A-parece inevitable

en este afán de unir las partes

de este acertijo que es mi vida

he detallado cada pieza

por olor textura conversa

y sensaciones

Habita en mí una casa

II

Habita en mí una casa azul

me empeño convertirla en verde

con el azul de mis medias escolares

y mi camisa amarilla de liceo

perfecto verde adolescente

Elegí al sol

III

Elegí al Sol

su alegría solidaria y constante

los refranes que le inventan

eje de vida

salvador de tinieblas

alegría de los alegres

el sol se acerca

habita en aquella casa azul

que hoy es verde

IV

Verde verde verde

de mis 59 árboles

verde de flamenco

verde de mi albahaca 

mi aceite y mi vestido de 15

verde que se diluye 

entre mil versiones de verdes

verde que apresura y paraliza

el verde del espíritu

de mis más amados

verde es mi poesfilia                                         

revernacida

verde el justo panorama

de mi paleta de colores

sigo verde y me consumo

agito agito agito

la leche para mí café

V

la leche para mí café

es obligatoria

está en todas mis versiones

en el rompecabezas que me construyo

para no perderme

allá en mi quebrada

y en las montañas de mis Teques

en cada lugar donde viven mis afectos

espeso espumoso

amanecer

VI

Amanecer

susurro tu nombre

dibujado en mi espalda

cuando no tiene ojos

tu nombre en mi espalda

es mi paz y mi alegría

tus brazos

abrazan mi cintura

estremecida

como aquel día

en aquella cabina telefónica

VII

Veo la cabina telefónica

reflejada en el espejo

el abrazo por mi espalda

un va y ven en mi vagina

un palpitar de

relámpagos

VIII

Relámpagos

el abrazo por mi espalda

en mi cintura

sus dedos cerca de mi ombligo

en el mundo hedoné donde vivía

convertí una versión de mi

en cataclismo

vestida de nubes

multicolores unicornios

y griegos que me amparan

me fui por aquella calle

caminaba contigo

con mi falda de flores

en tu recuerdo

bajando por el río

nunca fumé cannabis

aun así

un abrazo de tus brazos

rodearon mi cintura

allí permanecen

mejorando-me

IX

Mejorando-me

el abrazo mi cirugía

cura el mal de amores

salva a los perdidos

sostiene al deprimido

soba el cuerpo de dolores

simplifica las palabras

acompaña el silencio

un abrazo me detuvo

por un rato

bajo el mismo techo

de uno de mis amores

abrazo

cruje el bien de muerte

y deleita el mal de vida

X

Vida y muerte se encontraron

en el zaguán de mi casa

las dos mujeres entraron

sin pedir permiso

mis versiones unidas a ellas

anuncian su llegada a mi cocina

vida y muerte pasaron a mi cuarto

cuando tenía cada cosa en su lugar

conjugaron su verbo en mi palabra

y soñaron construir

un verso victorioso

para la eternidad

XI

No escribo versos para la eternidad

soy el fraude de la palabra

no hay metáforas

ni buenaventuras

para la tristeza

la naturaleza

el desamor

la muerte

la vida

otras voces magistrales

describen mis sensaciones

seré de las que aplauden

me hago experta en adverbios

para marcar la diferencia

o me convierto

en una atrevida simuladora

y fraudulenta de la palabra

Sé que la luna tiene alas

XII

La luna tiene alas

ella juega conmigo

y me ofrece milagros

yo la contemplaba

y sus alas cubrían mis oídos

del sonido de las chicharras

aquel

incrédulo y terrenal

no hace nada

no la alcanza

y culpa al tránsito

XIII

Tránsito

así transito lento

desamparada a borbotones

entre el sueño que no tuve

y un dormir interrumpido

esta versión actual

permanece despierta

hasta inhalar y exhalar

un bocado de verdes

y más verdes

 XIV

Verdes y más verdes

reaparecen

la niñez en brazos

y los poemas de Antonio Machado

colgados en la espalda

así voy al paredón

el disparo será preciso por falsificar la palabra

el juicio será lento

y un dolor clavado en medio de los dedos

impide tocar la luna que en lo alto

me ofrece sus alas

XV

Me ofreció sus alas

para no transitar por el lugar de siempre

crucé a la izquierda

sentí tres cruces en mi memoria

testimonios de secretos de la infancia

miré nuevos paisajes sin tu par de anhelos

y este amor amado quedó en la nostalgia del beso

esta versión

una de tantas

XVI

Soy una de tantas

una mujer de caminos

de luces de líneas

soy una madrejer clásica

soy una mujer de amanecer

viajo a ser una mujer de silencios

que va y viene detrás de sus afectos

y hoy se esfuerza

por no hacer lo que le da la gana

soy una mujer que mira la luna

y la vive en todas sus fases

que despierta viva

que vibra camina llora

soy una mujer que se equivoca de lugar

una mujer de olvidos

una mujer de cincuenta y nueve mil

trescientas cincuenta

y nueve versiones

XVII

Nueve Versiones

tiempo de abrazos

soledad de besos

camino en pausa

pongo en ayuno

mi palabra

 XVIII

Pongo en ayuno mi palabra

los herederos de mi ADN me recuerdan

como quien quiere ser feliz

como quien se anima y alegra

en un arrebato de impulsos e intuiciones

fraude fraude gritan mis neuronas

en esta guerra de sentires y pensares

me salva mi especie

XIX

Mi especie

debe hacer lo terrenal

quisiera ahogarme entre las letras

crear de un pedazo de luna

versos de poesía

construir mi versión  de poeta

XX

Construir mi versión de poeta

obsesión nocturna

caminar viva y distraída

mirar profundo y sin detalles

desubicada

para llegar al parque retenida y camuflada

para que no respiren de mi aire contagiado

me imaginé en el algodón de azúcar

en el aplauso de las palmeras

parpadee con mis poros que no ven

ni la cascada de arcoíris

ni las notas musicales

y menos

la mosca en el agua

XXI

No vi la mosca en el agua

distraída a la hora del almuerzo

pudiste ser noche o madrugada

luz que quema

me vivo y me sonrío

en esta versión

 XXII

En esta versión

derretí mi ánimo

guerreada con el tiempo

reviso mi aprobación

me aseguro si poesfilia es su apellido

aquel libro que dejé para los herederos

de mi ADN

XXIII

Los herederos de mi ADN

deben ver

en los ojos la luna

en el río a poesfilia

en las flores de amarillos

el día

yo miro el mar por el retrovisor

curtido de huellas y espasmos

que hago sin el asombro

escondida en el árbol

de los ocho troncos

indago

en la arena las piedras

en las nubes al unicornio

en el verde mis 59 árboles

en el asombro la vida

en la ingenuidad la pregunta

en el mar la sal

XXIV

En el mar la sal

de mis versiones

se reúnen al atardecer

se dan palmaditas de hombro

se desesperan se calman

se masturban

y limpiamente

deciden

quién mandará

después de la noche

XXV

Después de la noche

la paz no es

ausencia de guerra

la amenaza

y los ojos en la espalda

protagonizan

la vida en la muerte

XXVI

La Vida en la muerte

hálito humedecido

silencio en comunión

árbol de flores azules

brisa mañanera

diluvio de colores

risa de río

devenir de historias

nada por inventar

XXVII

Nada por inventar

cada versión se dispara

para conquistar

lo que ha de estar

la playa con su arena

la arena con sus piedras

las piedras entre las rocas

las rocas unidas a otras rocas

cada versión se construye

para transformar lo que ha de ser

el cielo con su arcoíris

la luna con sus alas

el sol con su alegría

el río con su caudal

ellos y nosotras

de paso

XXVIII

De paso

ya no voy

en esta versión

una casa me habita

una casa de árboles

con toda y sus raíces

un violín y una flauta

un cuatro y una voz

unos niños y unas niñas

aliento vital

de asombro permanente

XXIX

De Asombro Permanente

me iré de este mundo

y cuando me pasee con ella

no podrá reconocerme

un azul de metileno

un ave en mi sombrero

unos aretes originarios

un papel y un lápiz

y mi silencio

será mi propio asombro

asombro de mí misma

XXX

Asombro de mí misma

en esta casa verde que me habita

de eses y más eses

ese de soledad

ese de sueños

ese de silencios

ese de salud

ese de sepulcro

ese de seroja

ese de suspiros

Guerra de eses

XXXI

Guerra de heces

en este planeta vivirundo

mientras nuestra especie moribunda

por su propia causa

encerrado en el portal del tiempo

iracundo hacen la guerra

las aves continúan su canto

el mar va y viene en su constancia

la luna y el sol

el relámpago del cielo

se saludan y se abrazan

Guerra de heces

por el poder

XXXII

Por el poder

derrame de sangre

delito de vida

dinero de muerte

dónde están 

las guerreras por la vida

los santos por la muerte

y las palomas por la paz

XXXIII

Las palomas por la paz

se encuentran en los parques

casi siempre

con la risa de las niñas

las palomas se escondieron

en la tarde

para mirar desde su nido

la ruta de los desastres

no se duermen

miran a quien camina

al lado del árbol

el árbol regala su follaje

al nido de la paloma

la paloma de paz no va

se reproduce

XXXIV

Se reproduce en silencio

cómo hará la Antártida

sin las mariposas

dolores

dolor de humanidad

dolor de grito

de lágrima oscura

de humanos pequeños

tiempos de guerra

las voces de los inocentes

serán alaridos

que nadie callará

XXXV

Nadie callará las chicharras

con la brisa caliente y fría

en este mar

palmeras abrazadas

descansan mi descanso

tiempo para sentir

el vaivén de mi hamaca

las olas callaron su singular canción

asisto al concierto de chicharras

con entrada libre

se escuchan sus gritos

tengo un sueño

 XXXVI

Tengo un sueño

en mi aposento

en mis manos la fuerza

en mis ojos la mirada

en mi cuarto una idea

y en mi cerebro la paz

en mi vuelo

cambio de color

XXXVII

Cambio de color

para el planeta

con el amparo de los solos

reunidos

sueño de las olas

que se encuentran

en aquel mar soberano

de la vida

amparo de los juntos

que enfrentan la otra especie

me calco de mentira presuntuosa

no hay disparo que los mate

cómo descorrer el velo de lo falso

sí turban la frágil inocencia

de niñas y niños que caminan

sobreviviente de egoístas

de los sin patria de innobles

disparan destruyen

y no aman

XXXVIII

No aman

aunque quisieran

no les duele el hálito de vida

humedecido por la arena

que moja el mar cuando llega

prefieren

estar secos e ignorantes

me mata esta versión

de mi conciencia inútil

por no hacer

nada de la Nada

XXXIX

nada de la Nada

sin el tiempo

reposa de quehaceres

y estornudos

activa su cerebro

y sus manos

para evitar la pesadumbre

ananké aparece como magia

posee y estremece mis pesares

la valentía de escribir sin prosa

es otra vida de aza-har

azahares de hacer y transformar

de poner adorno sin reparos

espero que la ola moje

el llanto irreparable de la historia

XL

El llanto irreparable de la historia

pasea su cuerpo por mi estómago

permanece entre  erres y eses

para no morir en el intento

transformar

esta historia que no acaba

esa lucha interminable

entre fuertes y débiles

en esta versión

me detengo a imaginar

y soñar en utopías

por ejemplo

unidos caminamos

haciendo de cada día

el mejor día

XLI

El mejor día cuándo llegará

si es que llega

en alguna madrugada

espera la noche anochecida

simplemente no pasa nada

nada y algo

por la misma autopista

transitan

esperan camino al sol

que un milagro acompañe

el milagro de la vida

XLII

 Milagro de la vida es lo que veo

dos océanos se encuentran

un cielo gris y otro claro

la lluvia y el sol

y esa luna enamorando

milagro de la vida es lo que siento

un rayo de sol en mi brazo

la brisa moviendo mis cabellos

la cosquilla sobre mi espalda

corteja la imaginación 

de mi cerebro

milagro de la vida es lo que huelo

la albahaca

en el patio de mi madre

el olor inconfundible del guayabo

que una vez estuvo y ya no está

milagro de la vida es lo que escucho

las piedras en la playa de la guardia

aguardan dos cuerpos tumbados sobre ellas

el sonido abrumador de las chicharras

las olas del mar contando sus secretos

milagro de la vida saboreo

en el dulce quesillo de mí siempre

que acompaña y heredan mis amados

en un intento trascendente de la vida

libo los labios ausentes

el limón la fresa y el mamón

sorbo los días nublados

que me esperan

XLIII

Días nublados que me esperan

en este experimentar con la palabra

el silencio cuando habla

lo dice casi todo

y ella mi enemiga

se burla entre clamores

días azules me esperan

de tanto hacerlos esperar

esperar no viene de esperanza

esperar del propio andar

XLIV

Del propio andar

cuando anduve de paso

paré en la montaña cabra

no la subí

sé que me espera

montaña y mar

aparecen

en una eterna competencia

no basta mi desnudez al sol

para resistir este silencio

XLV

Resistir este silencio

como quien va de excursión

por el desierto

viento compañero audaz

y voluptuoso

no para nunca su presencia

huellas en la arena

ofrecer aire a mi conciencia

tengo otra idea

para que la muerte

no me alcance

XLVI

Otra idea para que la muerte

no me alcance

el colmo de la ilusión y la mentira

ella se viste de arcoíris

entra sin provocación

no basta

llenarte de oficios

tareas sueños

amores y dolores

vuela te saluda

no cambia sus colores

te atrapa a pesar de tu vuelo

otra versión nace

XLVII

Otra versión nace

en esta me transformo

soy tierra mar montaña

soy agua fuego aire

soy todo

y soy la nada

XLVIII

Soy la nada asomada en la ventana

miro la gente pasar

y escribo escribo escribo

me detengo en este cruce de la vida

que hace treinta años me repito

debo buscar

la sombra de un árbol rico

el más frondoso del parque

el que tenga ocho troncos

una raíz extendida

un círculo gigante

debo sentarme en su raíz

y escribir escribir escribir

hasta que muera

XLIX

Escribir hasta que muera

en la sombra de un árbol de mar

frente a las picudas

agradecer el abrazo de brisa

aliento de mi versión poesfilica

el sol con su fuerza

y su poder

me corre de la roca

L

Me corre de la roca

me obligó a mirar lo que falta

mis piernas mi vientre mi rostro

revela el paso de los años

lugar común de la palabra

me consume

llega la lágrima con recuerdos

de mi versión mamá

llega la nostalgia de Eman

con todos sus detalles

LI

La nostalgia

encuentro en mis recuerdos

la sopa de los domingos

una memoria que no cuenta detalles

ni subraya sensaciones de esas estaciones

trasciende lo vivo en el tiempo

\"No soy de aquí ni soy de allá\"

\"Caminante no hay camino

se hace camino al andar\"

la nostalgia resucita

llena de alucinaciones

que te quitan la ropa

LII

Alucinaciones que te quitan la ropa

despojan tu espíritu

transforman tu cerebro

de vez en cuando

me quedo con la luz

veo puntos blancos en mi piel

sus manchas y sus manías

en esta estación primaveral

brillaré con mi albor

haré de mi vida

un hacer constante

le contaré a los jóvenes

mis secretos

a mis nietos

mi inmortalidad

a ellos les leeré poemas

ellos declamarán por mi

en esta vida que no para

LIII

En esta vida que no para

las palabras de entusiasmo

los escondites de emociones

la hoja grande que cae

lo cotidiano del almuerzo

el don de niña que te enseña

en esta lucha inacabada

te halaga te sorprende

allí en las nubes de la vida

llega el momento

de inicio y final

LIV

Momento de inicio y final

transcurre el tiempo enamorado

con canto de jilgueros

soledad silencio

inicio y final encadenados

en delirio de azul encendido

calma la angustia y la tormenta

muere el nido y su canción

LV

Muere el nido y su canción

en el mudo niño que se marcha

quietud de horizonte naranja

habita mi casa verde

el jardín ha florecido

ya no basta ya no basta

asomar la línea curva

ver el blanco de las garzas

en esta casa verde que me habita

se pelean todas mis versiones

nadie gana nadie pierde

 LVI

Nadie gana nadie pierde

el sol con su amanecer

la luna viendo poetas

la raíz del árbol

el verso que no contengo

y la copa de vino

el brindis por el adiós

LVII

Brindis por el adiós

consumo el final

como el principio

la mitad de los caminos

en esta versión retorno al centro

sin regresar

la vía

se acomoda para mí

las palabras me resucitan

 LIX

Sueño de nutrias

con mi último aliento

celebro la juntura

de cerebro cuerpo corazón

que acarician y festejan

Una nueva versión de mi