En el silencio es el templo donde el poeta habita,
allí se gestan los versos, en susurros callados,
y en el eco del vacío, su voz se agita,
revelando en la quietud los misterios consagrados.
El silencio, morada del pensamiento más profundo,
es el lienzo en blanco donde el poeta pinta,
y en cada pausa, el universo se hace fecundo,
desvelando verdades que la palabra no alcanza.
El silencio, templo etéreo de la inspiración,
resguarda en su arquitectura la esencia del ser,
en su armonía yace la más pura comunión,
y el poeta encuentra en él su razón de ser.
Pues en el silencio se escuchan las voces del alma,
los suspiros del tiempo y las lágrimas del universo,
en su sutil melodía, la vida cobra calma,
y el poeta, como profeta, desvela su verso.
\"El silencio es el umbral de la eternidad,
donde el poeta encuentra su más fiel morada,
en sus palabras vacías, el infinito se revela,
y en su silencio profundo, la verdad se consagra\".
En el silencio, el poeta encuentra su morada,
donde los versos fluyen en cadencia sublime,
y en el eco de su voz, la belleza es proclamada,
pues el silencio es el santuario donde el poeta habita.