Por el Dios Dinero he sido ninguneado, defenestrado,
humillado, vilipendiado y traicionado,
por el Dios dinero he perdido falsos amigos,
por el Dios Dinero he conocido los infiernos..
Porque el Dios Dinero tiene infinitos adeptos,
ciegos a todo respeto a los principios,
su ángel, el status, es otro de sus caballos,
no se compite, se pisa, se destruye a los otros.
El Dios Dinero te capta cuando nada más te importa,
todo lo demás es sucedáneo y estrambótico,
es obsesivo por ser el mejor en el trabajo corporativo,
pero también obligado a destruir al enemigo.
Pero cuidado, fieles y devotos del Dios Dinero,
en algún momento, yo lo he sentido,
querréis un amigo, un amor fidedigno y auténtico,
y siempre tendréis la duda de si sos un cretino.
Devotos de carros escapularios,
de mansiones de blasones aterciopelados,
de esposas que adornan vuestros cuadros,
de plebeyos que sujetan vuestros trabajos...
Dios Dinero, yo nunca te he seguido,
sin embargo te entiendo, te respeto,
porque eres demoníaco, eres inmundo,
y aunque me duela admitirlo cada vez eres más populoso.🤔
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