Lea Nieves Torres

No al maltrato infantil

Niñas, sí, porque una niña, hembra, es distinta biológica y psicológicamente de un niño. Niños, machos, biológica y psicológicamente distintos a las niñas, son traídos a este mundo, a veces por deseo de sus progenitores, otras veces por accidente, en fin...

Estás criaturas indefensas y vulnerables, son sometidas constantemente, aún desde antes de nacer, a infinidad de tensiones, tensiones por contaminación química_ambiental y biológica-, contaminación por ruido; sometidos a tensiones neurológicas, aún desde antes de nacer, lo cual deriva casi siempre en problemas psicológicos. Al nacer, en un mundo completamente alienado, pasan a ser una especie de propiedad de los padres y o sus sustitutos, que en la mayoría de los casos ignoran que los niños son seres humanos, seres sintientes, no simplemente seres vivos. Casi siempre, los padres, con pocas excepciones, se refieren a ellos como si fueran objetos de su propiedad, a los que pueden maltratar: verbalmente, gritar, _sus voces son látigos que golpean- físicamente, golpean con las manos, con cuerdas, con palos, los hieren con objetos contundentes; psicológicamente: los tratan con indiferencia, los ignoran, les impiden expresar sus emociones, los presionan, los torturan mitificando el maltrato con el pretexto de ser los padres, los criadores, los tutores; los abusan sexualmente, de muchas maneras, aprovechando la inocencia de las niñas y de los niños; los explotan: sometiendolos a trabajos muy pesados, no remunerados, dentro y fuera de los hogares, desde temprana edad; les delegan responsabilidades propias de los adultos, con un cinismo propio de los más despreciables sádicos. Cuando estás niñas y niños entran a interactuar en la sociedad, es decir, en sus escuelas, colegios etc. son presas fáciles de los depredadores de todo tipo y clase, debido a que desde sus hogares sufren el daño, que casi siempre queda oculto, daño normalizado desde su entorno familiar.

El Estado, como tal, tiene Miles de leyes e Instituciones, que en la mayoría de países, son semejantes a elefantes blancos, mientras en el mundo Miles de millones de personas con daños neurológicos consumen a diario Miles de millones de pastillas para dormir, drogas alucinógenas y alcohol para evadirse.