La flor necesita de de tierra,
obligada está a no mudarse;
poco a poco crece, poco a poco muere.
Dice admirar lo abismante del sol,
pero un poco de sombra vendría mejor.
puede soportar el soplo del viento,
pero harta está del sol y su tormento.
Solo es libre al estar solitaria,
liberada de aquel cálido espectro.
Muere un poco menos al llegar la noche.
Florece a su tiempo y no le importa ser de otros,
su tallo solo será pasajero.
Dónde yace, la tierra es perfecta,
pero poco a poco se envenena
al haber tantas distintas a ella.