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Con las alas puestas…

Con las alas puestas…contemplando la lejanía astral de lo perpetuo.

 

Desde la cúspide del sosiego…alborotados mis cabellos con el viento,

erguida la estatura…con mi traje de hidalgo combatiente.

 

Desde ahí, diviso mi pasado...

del que pude escapar incólume y bien librado.

 

¡Ay de mi si no lo hubiese hecho! ….

¿Qué hubiese sido de mi si me dejaba abrazar del frio fracaso?

 

Cuantas batallas pudieron acabar conmigo,

cuantas derrotas estuvieron a punto de quebrar mi aliento,

de que espantosos escenarios hui con mi exasperado instinto.

 

Cuanta historia quedó tirada en aquel escenario amargo…

donde yacen abatidos tantos bellos sueños,

ahí, donde sepulte con tanto dolor algunos episodios…quizá los más queridos.

 

La nostalgia irrumpe a veces…al mirar atrás,

y como no recordar los tiempos sufridos…

sí irónicamente con ellos pude reconocer el valor de la pujanza,

y adquirí el sagrado don de la paciencia,

y hasta puede alcanzar la sensatez de la templanza.

 

Ahí reconocí al Ser Supremo, al Dios patrono del todo,

en ese panorama lúgubre de aquellos hoscos momentos,

navegando sobre torrentes de lágrimas reprimidas.

 

Cuantas tempestades perennes…incesantes…

que no daban tregua a que el sentimiento escampen.

 

Ese idilio beligerante de la incertidumbre expuesta…

como canto de golondrinas inquietas… al morir la tarde.

 

Y de mi presente…defino el aislamiento,

la lejanía interpuesta para inicuos y crueles,

la armadura impenetrable…cerrada por dentro,

y un corazón sofrió y duro como piedra.

 

La mirada penetrante…como de invulnerable…

firme e insondable…

misteriosa y arisca…pero noble.

 

Con el alma rota…agrietada por tanta amargura digerida.

Y una soledad que se ha refugiado en la penumbra de la espera,

rodeada de un silencio que solo aprendió el dialecto de los versos…

para mis poemas de ahora.

 

Mas hoy…

con las alas puestas…contemplando la lejanía astral de lo perpetuo.

 

Desde la cúspide del sosiego…alborotados mis cabellos con el viento,

erguida la estatura…con mi traje de hidalgo combatiente…

siento que he superado la oscura trayectoria de mi pasado,

siento que he podido someter a mi tristeza…con una lucecita hecha de delirio.