Freddy Kalvo

Ya no llores, ya no sufras

Ya no llores, ya no sufras

¡Déjala que vuele libre

que la libertad disfrute

aunque tú te sientas triste!

Déjala que con sus alas

sea libre mientras vive

sus locuras amorosas

aunque el alma te lastime

porque llegará el momento

que tu amor ella suplique.

 

Y no sufras, y no llores

que el llorar no te redime

el dolor que hay en tu pecho

si el amor entero diste.

Ya verás nuevas florestas

lo sabrás, cuando camines,

y a la vera del camino

veas muchas codornices

con sus alas extendidas

volando hacia las planicies

en la búsqueda de nueces

cuando el alba otra vez pinte.

 

Ya no llores, ya no sufras

porque el alma se comprime;

y no sufras, y no llores,

busca flores más felices

que te adornen la esperanza

para que el dolor te quite

con aromas de Magnolias

o de Rosas y Jazmines,

Margaritas y Azucenas…

¡Pero ya no sigas triste!