Nadare en vísperas a que un amor se ponga de pie.
Nadare a buscar una vivencia en el camino del farol.
Sin anclas y sin sogas solo y despejado.
Al norte o al sur habrá un gran espacio que cubrirá el dolor.
Nadare dejando en tierras las apariencias.
Nadare sin llegar y sin cumplir.
Nadare esporádicamente interrogando a solas el espíritu.
Nadare rodando las aguas sin divisar al horizonte.
Dividiendo el alma al este y oeste.
Dejando en la mar mi perspectiva, y un montículo de llegadas tempranas.
Nadare a punto de disolverme.
Me entrego y me alojo en los mares como si fuera mi nido, mi cueva a un piso inestable.
Nadare sin amor por la rivera, o por proclamar suelos, cerca de poder encontrarme.