Con pose de coqueta
expuesta a muchas miradas,
es causal para muchos
de deseos carnales,
ella queda impávida
ante tales insinuaciones…
sonríe con picardía,
¡inconcebible no estés enojada
son hombres degenerados!
cualquiera le diría,
con voz muy queda responde
no soy mujer que se siente ofendida
por despertar un deseo,
es algo latente en el humano,
mientras no sea malsano
lo tomo como un halago,
sabe que frente a la moral
creerán es una impúdica
y eso la tiene sin cuidado,
para ella los placeres de la carne
son mundanos y si con tretas
la quieren seducir
con sutileza saca sus garras.