-La Mordedura-
Me voy, pero te dejaré…
la peripecia de un encargo,
lábil deuda del tiempo añejo,
saldo de apenas un recargo.
¿ Recuerdas intensas novelas
de aquellos ardientes momentos
que tremolaban las velas?,
sádicos masocos tormentos.
Si quieres ven pronto conmigo,
dispensa de un lego indulgente
sin el sello del confidente.
Brincaré como un perro amigo
que la vieja mordedura,
ya es cicatriz que no perdura.