Tu nombre viene lento como las músicas humildes
Y vuelan palomas blancas en un parque de ensueño.
Tu recuerdo me viste y me desviste
Hay un frío tan hondo que cala la piel
Como si el invierno se hubiese posado
En un corazón que latiendo persiste.
Quiero gritar tu nombre pero lo impide un labio rajado
Es entonces que el silencio me acompaña
Y puedo culpar al ser enamorado
Que espera y espera para verte hoy
Y no mañana...