Como van las olas rompiendo embravecidas
Espuma fría contra el arrecife que las limita
Así de tenaz es tu esperanza ante el embate
De la debilidad y desasosiego que te arremete
Habiendo sorteado ya tantas ttibulaciones
Tu cuerpo martirizado por el dolor entregas
Sabrá Dios en sus misterios por cuál causa
¿Cómo lo afrontas sin quejas ni blasfemias
Mientras mil agujas lo recorren incesantes?
¿Cómo rescatas el optimismo y la confianza
De entre esas largas horas así postrado?
Yo que solo traigo en mis manos la caricia
Y mis labios rebuscando consuelo sin pericia
De bien ánimo y aunque fuese breve
Quisiera tomar tu lugar por verte libre
Y soportar como mío tu suplicio
Compartimos tanto en ese recóndito refugio
Inexorable entonces tras sólidas murallas
Que llegando al verlas exclamé ¡maravillosas!
Ahí las letras valieron más que las palabras
Abonando desiertos yermos y cielos cenizos
Entre nubarrones se produjeron las centellas
Abriendo en el suelo botones con su lluvia
Y escanceó el amor su licor en copas de oro
Tomaste el timón esos días memorables
E hincharon mis velas hacia levante
En cada escalofrío que perla tu frente
En mi vista y corazón son latigazos
Mana a borbotones sangre amarga
Sin hallar mi alma cómo apaciguarla
Mas si mi pobre presencia te satisface
Llevándote dichoso a esos ayeres
Hilvanemos sus preciadas estrellas
Y si la providencia nos concede vida
Alumbren ellas la oscuridad avecinada