La dejaron despojada,
le robaron el dinero.
Dicen que fue un forastero,
del que no se sabe nada.
La dejaron maltratada
y tirada en el lindero
que después un aguacero
la dejó bien anegada.
Pero luego la buscaron
un soldado y policía
y ultrajada la encontraron
a la luz de un nuevo día
y a la pobre la dejaron,
con la barriga vacía.
¿Quién le da a la Fiscalía,
de la víctima su nombre?
¡No se asuste, no se asombre!