Vení, por favor, acercate despacito
Yo sólo pretendo un pedacito de amor
Voy a implorarte todos los días
Que uses conmigo la ley del talión
Esas noches que te quiero con locura,
Rezo cual cura que despierte tu amor.
Te tengo cerca pero siempre tan lejos
No son feas mis cicatrices, feo soy yo
Largo y tendido, te miro y te despido,
Siempre repetido el mismo ciclo te doy
Y cuando vuelvo me traigo conmigo
Una mezcla de alegría con resignación
Voy sin destino en tus pensamientos
Así ando algo perdido, sin excepción
Pero aún conservo un sexto sentido
Y pide a los otros cinco mi extradición
Lo poco que tengo para ofrecerte
Está tan ansioso como impoluto
A cambio, no osaría pedirte mucho:
Que lo poco que tengas sea absoluto.
Ostento como un galardón
Mi cobardía en el amor
Sin viento y sin marea
Igual me da miedo agarrar el timón.