Antiguos Rostros se Develan
en el Océano Profundo
de Azules Cristales y Olas en Vaivenes...
En las Mares de Plata
que Siempre
Lavan tus Incongruencias y tus Miedos...
Es la Mudez Sagrada de Tu Ser
en Fuga...
Es Quizás la Nave Ufana de tus Versos
que Salpican en Soledad,
Metáforas y Palabras...
Es tu Raíz- Semilla en Breves Sintagmas
que Abruman
Hasta tus Hieles y tus Entrañas...
Insaciable el Tiempo te Corroe
con esa Carga Peculiar
de los Ayeres...
Es el Mediodía en Noche Sellada.
Ya no hay Otros.
El Silencio Corta el Aire
en la Aridez Nocturna que No Muere...
Es el Leve Despertar en el Otro Insomnio,
Y en la Perfecta Muerte que Ya no Hiere...
Es la Sin Urna,
Es el Sin Epitafio,
Es la Lápida,
y esa Furtiva Lágrima...
(Patricia)