Me arrepiento de todos los momentos
que pasaron por mis ojos entre vértigo…
Me dejé arrastrar por la corriente
de un torrente de agua y desenfreno,
cuando siempre detuve mis pisadas
ante cambios sin sentido en el pasado…
Nada explica esos momentos descarnados;
nada queda finalmente, sino el barco
que me lleve a puertos quietos
donde pueda arrepentirme eternamente…