Digamos que cuando el fuego nació conocía su destino
digamos que cuando fue sostenido en brazos
no tuvo que vivir una infancia explicada desde el cielo
nació con un destino
Hay cosas que se explican mencionando su nombre
todo puede ser más fácil si acusamos una levedad en el otro
sí
somos capaces de ser los responsables de que el mundo gire
y que gire a nuestro alrededor
somos insectos buscando insufriblemente una sombra
Este tiempo cuestiona a sus antepasados (digamos)
acomoda los valores a su conveniencia
después el contexto es el responsable de solo cocinar odio
reclamamos amor como niños sin ningún tipo de brazos
Le decimos a la tierra que nos ame
que nos brinde un calor esfumado hace tiempo
y nos creemos herederos de una civilización atemporal
jamás cuidaremos el deseo porque es cíclico su aguijón
Exigimos una compasión en silencio
tropezamos con el recuerdo que edifica una miseria
celebramos la caída del otro porque vivir es un sueño
humano de su propio experimento
el dolor no te salvará