Hay días que amanecen desordenados...
No son ni negros, ni grises, ni claros....
Donde el aire trae aroma a nostalgia...
Días en los que la pena anida en el corazón a pesar de que afuera brille el cálido sol.
Días en los que se pega el cuerpo a la incertidumbre y crece como la espuma la tristeza.
Un día para lo que lo inentendible limpia con lágrimas el alma anclada al borde de una nebulosa inexplicable...
Un día en donde todo está desordenado....
el cabello, la cama, las palabras, el corazón....
la vida...
LHS