Tierra seca de amarillo llena
Dura de rocas talladas
Sembrada como un milagro
Espera codiciosa el agua
La muerte ronda la tierra
Como un pastor sin descanso
Es la parca silenciosa
De sus harapos despojada
Casas de adobe guardan
Sus mitos como un orgullo
Ya solo queda el recuerdo
De labriegos incesantes
Ya el cementerio espera
A los viejos labradores.