¿Cuándo acabará mi pena?,
¿Cuándo el dolor de mi pecho?
Sí el bienestar, por derecho
Llegara con la condena,
Sería una cosa muy buena
Iniciar con el castigo
De corazón te lo digo
Acaba con mi suplicio.
Y en pago a mi sacrificio,
Sigue tú siendo mi amigo.
Mi Dios, mi amigo Jesús
Jamás Tú me dejes solo
Hazme vivir con decoro
Al amparo de tu luz.
Y no como el avestruz
Que ocultando su cabeza
A su Dios nunca le reza.
Esgrimiendo su problema
Esclavo de su dilema
Vive en constante tristeza.
Perdóname mis errores
Por el daño que causé.
Pues yo nunca lo planeé,
Pero provoqué dolores,
No te pido miel ni flores,
Un castigo me merezco,
es por eso que me ofrezco
en cuerpo y en alma a Ti,
porque ahora lo entendí.
Por tu gracia, lo agradezco.