En la tierra germina el vapor de las semillas de agua, vueltas jardines blancos del cielo azul,
y el momento es bellísimo, te tomo la mano, todo es una fotografia en el pecho.
Escapando...vamos como alas celestiales tu y yo, alas de promesas, esta tierra momentánea no nos atrapa con sus trechos
porque vamos hacia la forja ardiente del Eterno, y su Cristo (nuestro Cristo), a ser fundidos en la eternidad.