Busco una palabra por debajo de la acera. Entre las raíces de los árboles y en rincones escondidos.
Busco una palabra entre las piedras, botada y extinta por tierra. Por las orillas sombrías. Por el lado interior de mi camisa y en barro seco de la suela.
Busco una palabra que diga lo que aún no he dicho, que sepa a aire, a hierva y a vereda. Una palabra mojada de penas, salada de alegrías perdidas y ligera.
Una palabra desnuda, redonda, suave y tibia como la arena. Una palabra que insinué amor, melancolías y ansias que esperan.
Busco una palabra que rime con vida, con flor y sentimiento...
¡¡Para dártela entera!!