Recuerdos de vivencias miserables,
entornos mugrientos,
rocas, lajas
recuerdos, como capas,
memorias de vida, dura, fuerte,
lagrimas sacian tu sed,
el agua que no brota de camiones
dinero que no emana de la magia,
tristeza que moja los rostros.
Agua en pipa como piscinas
reservadas para larvas,
dolores intestinales,
emerge la vida ancestral de bacterias
queriendo vivir su espacio vital.
Agua de vida y de muerte,
como un destino manifiesto
de pobreza y encanto.
Techos de cinc agujereados para que,
entre el sol en paredes negras de plásticos,
donde antes la mercancía guardada
pertenecía a blanquecinas manos
de muñecas suaves adornadas de rolex.
No hay rabia, no hay venganza, solo hay razones,
malas palabras sintetizan el pensamiento.
Antiguos pesares, viejos dolores, angustiada existencia,
Ruleta al fin, parada incierta,
suerte etiquetada, irreversible, eterna.
Solo es un recuerdo de vieja existencia,
cerros convertidos en colinas de ascenso clasista,
lucha entre iguales para no parecerse,
traicionados por obscenas palabras.
Heme aquí, viejo, arrastrando los pasos,
en la misma vereda de siempre,
esperando el cambio,
la lluvia que lo lava todo,
incierto mañana,
gritando como loco,
mudo de rabia,
palabras obscenas,
para maldecir,
que no he tenido suerte,
ni las ganas de parar de gritar
esas palabras.