La luna brillaba serena,los grillos tampoco se perdieron la ocasión.
Primero fue el miedo, luego la duda y después por fin llegó el valor,me acerque a esos inexpertos labios con los que hace años soñaba y los acaricié con la mayor suavidad que un torpe como yo puede dar,sentí que hice un viaje express al paraíso, toque el cielo cuando acaricié esos deseados y rojizos labios, luego te observé,aún estabas con los ojos cerrados tomando mis torpes dedos izquierdos con tu suave mano de princesa,esa tarde noche las estrellas no estaban solo en el cielo...