LA SOLEDAD
Ha tocado a mi puerta esta noche,
ha venido a quedarse, me ha dicho,
pero no para siempre…
está solo de paso.
Me ha rogado un abrazo
que le alivie las penas
(tiene propias y ajenas)
y no encuentra consuelo...
Pues conoció el cielo,
el amor más sublime,
y es ahora que gime
porque está en el infierno...
Pero nada es eterno...
\"Ya vendrá quien te quiera
cómo tú te mereces\"
Me ha pedido que rece
y desnude mi alma...
Y cuando llegue el alba
seguirá su camino…
\"Quizás el destino
me depare alguna sorpresa\"...
Y el amor habite otra vez
en mi casa...