¡Ah la vida,
como flor muy colorida!
¿Por qué sufres cada día
y te niegan la alegría
que mereces, vida mía,
si sangrando vas tu herida?
¡Ah la vida,
como flor muy colorida!
Si no estás en primavera
y el otoño está a la vera
eres ave pasajera
cuando vuela en estampida.
¡Ah la vida,
como flor muy colorida!
Y cual tallo de castaños
su corteza sufre daños
con los días, con los años
y al morir, quizá se olvida.
¡Ah la vida,
como flor muy colorida!
Solo queda la esperanza
que el espíritu en bonanza
ya no sufra lontananza
cuando quedes fallecida.
¡Ah la vida,
como flor muy colorida!
Toda planta con su flora,
por supuesto, se le adora.
¡Y ya muerta se le llora,
descuidada, envejecida!
¡Ah la vida,
como flor muy colorida!
Eres árbol con sus frutos
con sus muchos atributos
y en segundos o minutos
tú acometes la partida.
¡Ah la vida,
como flor muy colorida!
Dejas huellas mientras vives.
Si en recuerdos, tú revives,
solo espero que motives,
a vencer toda caída.
¡Ah la vida,
como flor muy colorida!