“Cuanta ironía, una mirada me ha puesto a dudar sobre el destino, una sonrisa me ha puesto a dudar sobre la vida, en fin, una mujer me ha redescubierto”
-Juaco-
He conocido el lado oscuro de la luna,
Observan atónitos el lado que refracta los rayos del sol,
Se fascinan con lo visible,
Con lo obvio,
Con lo que la luna les quiere mostrar.
Sin embargo,
El lado claro de la luna es corto,
Así que,
Mientras todos la embellecen desde la comodidad que ofrece la lejanía,
Yo quise ir para perderme por completo en el lado oscuro de la luna,
Ese que la luna le gusta guardar para ella,
Ese que la luna no me puede ocultar.
Le llaman de muchas formas,
Cada uno cree conocerla por algo diferente,
Hablan a su espalda mientras le sonríen a la cara.
Quieren opinar acerca de la luna,
Sin acercarse a ella.
Nadie se atreve a saltar en sus cráteres,
A trotar sus pampas indómitas de pálido color,
A buscar las estrellas en sus mares de polvo y cal.
A explorar las pecas en su superficie.
Dicen que la luna se aleja de la tierra en cada vuelta,
Creo que eso les asusta más,
La gente desea lo difícil,
Lo inalcanzable,
Más se acobardan en el camino,
Se seducen con lo sencillo,
Se conforman con lo que no les genera lucha.
Yo prefiero lo inestable,
Lo imperfecto,
Lo caótico,
Al fin de cuentas,
La luna me parece hermosa,
En especial cuando oculta más de lo que muestra a cada mortal.
Soy un cosmonauta empírico,
Aprendí a salir de la tierra cuando rompí con mis manos las cadenas,
Cuando bese las altas nieves de la tierra,
Cuando soñé volando entre las estrellas,
Yo quiero ir a la luna para acampar en su penumbra,
Para besar sus puntos ciegos,
Para conocer su llanto y su risa,
Para conversar con sus miedos.
Yo quiero ir a la luna y no regresar a la tierra.
Todos quieren la luz por el bienestar que les ofrece,
Yo prefiero las sombras por la dificultad que me propone.
La luna dice que no me quiere hacer daño,
Después de haberme atrapado en sus labios.
La luna me advierte que no le crea,
Y eso hago,
No le creo a sus palabras,
Le creo a su cuerpo,
A sus ojos chocando con los míos,
A sus rocas endurecidas a mi tacto,
A la electricidad de nuestros cuerpos.
He conocido el lado oscuro de la luna,
Sus contradicciones efímeras,
Sus silencios distantes,
Su defensa escéptica,
Su mirada cortante,
Sus gestos ásperos.
Su ceja alzada,
Sus pómulos rígidos,
Su boca encogida.
Su volcán en erupción,
Su tormenta hiriente,
Sus gemelos paralelos,
Su bravura ígnea.
He conocido el lado oscuro de la luna,
Y me he perdido en su negrura,
Me he enredado en sus cabellos,
Me he accidentado en su figura,
He naufragado en sus pechos,
Encallando en su cintura,
Me he despeñado en sus hombros,
Rodando con furia por su espalda,
He atracado en sus nalgas,
Me he ahogado en su pelvis húmeda,
He muerto en su libido,
He revivido en sus labios.
He conocido el lado oscuro de la luna
Y ya no quiero volver,
Yo no estoy hecho para la tierra,
Estoy hecho para la luna y las estrellas,
Para lo desconocido y lo infinito,
Estoy hecho para el lado oscuro de la luna.
He conocido el lado oscuro de la luna,
Quiero vagar de su mano por lo desconocido,
Por los soles y las nebulosas,
Quiero besar a la luna en fuego y en hielo,
Quiero abrazar la luna en todas sus estaciones,
He conocido el lado oscuro de la luna,
He conocido el lugar donde quiero empezar.