Cancionero le dicen, como añoro y panfleto,
Bosque pinto y desmanes nobles;
Nadie le escuchó. Entonaba los segundos, de un amor, del perdón a sus conquistas.
Pordiosero he escuchado, gritan en secreto,
Un laberinto y mariscal de roble;
Solo luchó. Por todos los mundos, por ser mejor, por unos ojos amatista.
Viajero aún existe, luz tenue, el respeto,
Mi amor distinto y tus pasos dobles;
Silencioso llegó. Entre sueños profundos, de mi color, casi mundo. Sin pistas.
Aventurero, escriben cartas en soneto,
Voz del recinto y férreo mandoble.
Las paz parió, entre vagabundos, bella flor, gotas de rocío y un talante de artista.