Sebastian Mena

A García Lorca

 

 

Verde que te quiero verde

 

y otras frases eternas

 

no han podido callarte

 

sigues vivo en tus letras.

 

 

 

La hora del té no existe

 

porque es bien sabido

 

fue tu hora más triste

 

cuando dieron las cinco.

 

 

 

Oh genial Federico

 

en ti me inspirado

 

leyendo aquellos poemas

 

que dedicaste a Ignacio.

 

Tantos versos escritos

 

tantas casidas y cantos

 

que tratan sobre amoríos

 

sobre gitanos y llantos.

 

 

 

Solo tú has logrado

 

con tu pluma exquisita

 

que la rosa aún no sepa

 

qué ha estado buscando.

 

 

 

Y aunque escriba mil líneas

 

nunca hare que te lleguen

 

solo podrás escucharlas

 

cuando Caronte me lleve.