eledendo

ROSAS DE AGOSTO

 

[… en mi casa de Vecilla de la Polvorosa;

en ella, con cariño]

 

 

 

 

... esto que estoy mirando es la casa de mi niñez;

... bien adentro, escuchando, se oyen melodías que viajan

de un lado a otro reverberando y tocando las cosas,

acercándolas, descubriendo su rostro que fue, por un instante

... éramos muchos en los días hermanos de los días

y mucha la labor, y el bálago, las vueltas de trillo y la nieve en diciembre;

vivíamos aquí, y en torno de la mesa, en el cuarto aquél, nos reuníamos;

... y qué cosas pasan;

inexorablemente sobreviene la ruina

y el polvo se acumula; como  la razón, si es que llega a comprenderse

alguna vez este quebrar, este despiece, esta desolación

que a jirones se agolpa y tunde la memoria;

... ríos de vida me devuelven seres y años con que fui feliz

y los mismos ríos me los llevan;

acuden gorriones al declinar la tarde, y, al ensombrecerse el patio, ensombrecen las rosas;

... pienso en ellas, y ya no puedo verlas.