Si eres un buen amante de corazón
Planta en el verso un rosa,
Para que más tarde con justa razón
Llegue a ser tu ansiada esposa.
Entrelaza sus raíces con tu mano
Para que jamás se sienta sola,
Y pasea con ella, en las playas del verano
Mientras en la roca se accidenta la ola.
Y si el otoño se lleva sus vestiduras
Acurrucala con amor a tu pecho,
Porque el mundo busca almas inseguras
Para descargar su cruel despecho.
Más en el friolento invierno
Protege sus rojizos pétalos con tu abrigo,
Para que su corazón tan puro y tierno
Sienta lo cálido de estar contigo.
De blanco y con su ramo de azahar
Acudirá a la boda,
Más Tú de azul, la esperaras delante del altar,
Y al verla le cantaras una romántica oda.
Y así , el gran día primaveral
Marcará el inicio de su vida matrimonial.
Aron Armijos