También escribo
del campo y las ciudades
para tus ojos.
Pequeños versos,
que salen de mi alma
para la tuya.
Pienso que en ellos
te dicen lo que siente
mi corazón.
Y que te llevan
palabras que te dicen
como soy yo.
De todas formas
el campo y la ciudad
están presentes.
Y es que la aldea
inspira los sentidos
por su ternura.
Y la ciudad
es vida y puro nervio
con su textura.
Ciudad y campo,
aldea y gran metrópoli
para nosotros.
Estoy seguro
que en ellos lograremos
la poesía.
Y sentiremos
la gracia y el embrujo
que en ellas guardan.
De todas formas,
te amo, mariposa,
no importa dónde.
Rafael Sánchez Ortega ©
31/08/23