THE EROTIC.
Sé que tú sueñas conmigo por las noches, que en ciertas horas te despiertas y que un río de erotismo invade todo tu cuerpo.
Te quedas con mis ojos en el suave pensamiento: que por más que tú lo finjas, yo sé que te seduzco con más de una mirada.
Y elevas una imagen de mis labios sugerentes, y los piensas recorriendo un instante entre tus piernas.
Te encadenas a mis brazos entre un sueño y un recuerdo, y yo penetro el gusto de tus lumbres más profundas, clavada a los encantos que inventan los silencios.
Sé bien que te acaloras con mis manos transpiradas y a solas en tus pechos, grabando en tus pezones las cimas del infierno.
Y tiemblas y te erizas con un fuego embriagador, de esos que se expanden hasta llegar a la mañana, haciendo de tu día un camino bajo el sol.
De pronto sé que sueltas un suspiro de placer, una brizna sonrojada que se apoya en tus mejillas, y en las horas más sombrías te disparas en el clímax.
Otra vez entras al sueño y no puedes olvidarme. Te moja simplemente la sensación de estar conmigo, ardiendo entre tus muros y sin poder decirlo.
Sé bien que tú sueñas conmigo por las noches, que me crees tan tuyo como tuyo nunca he sido. Y sin embargo, estamos cerca a pesar de estar distantes, sin ser grandes amigos, sin ser grandes amantes.