I
Aquel que no se aleja de sus pecados,
no tiene un genuino arrepentimiento;
sus manos y sus pies están atados
aunque sienta profundo remordimiento
II
Si estás arrepentido de tu error
procura el bien y aléjate del mal
acepta al Altísimo como tutor
y sigue su instrucción hasta el final
III
Mantén bajo control tu pensamiento
Y no permitas que mal gane terreno;
Has frutos dignos de arrepentimiento
Y mantén el enfoque siempre en lo bueno
IV
Todo árbol que no da buen fruto,
es cortado y echado en el fuego.
No hagas lo incorrecto, en lo absoluto,
ni dejes lo que debes hacer para luego.
V
Sin cambios en tu comportamiento
Tus palabras y oraciones están vacías
Pues el verdadero arrepentimiento
Se manifiesta en tu accionar todos los días.
VII
El hombre que ha cometido un error
y no lo corrige comete otro mayor
pues en ese proceso va de mal a peor
y degrada al mismo tiempo su valor.
VIII
El arrepentimiento te acerca a la verdad
e inevitablemente te acerca al Eterno;
Te santifica, pues Él mismo es Santidad,
Santidad que te aleja del infierno.
IX
Así que, arrepentíos y convertíos con un bautismo
para que sea borrado vuestro pecado;
y el Eterno creador envíe a Jesucristo mismo
,aquel que os fue antes anunciado.