Un inolvidable viaje
acompañado por bellas personas
que juntos vivimos
parte de la historia humana.
Bendecidos hemos sido
al caminar por Tierra Santa,
sanando heridas,
recogiendo fortalezas,
perdonando a los otros.
Experiencia en reflexión hoy tenemos,
para ser mejores al caminar,
pues la energía que desprende el grupo
hace que todos nosotros
renovemos nuestra esperanza.
Abrazos.