Luis Rayo

JERUSALÉN

 

Un inolvidable viaje

acompañado por bellas personas

que juntos vivimos

parte de la historia humana.

Bendecidos hemos sido

al caminar por Tierra Santa,

sanando heridas,

recogiendo fortalezas,

perdonando a los otros.

Experiencia en reflexión hoy tenemos,

para ser mejores al caminar,

pues la energía que desprende el grupo

hace que todos nosotros

renovemos nuestra esperanza.

Abrazos.