Aquellas bellas historias
De amor que tú vivías
En secreto, a mi me confiabas
Y yo con un silencio eterno
A ti te escuchaba
Pero aquel callar
A mí me dañaba
Y en mi interior
Lagrimas de sangre lloraba.
Mientras aquel sentimiento
Poco a poco
De mi se apoderaba
Aquella tristeza
A nadie contaba.
Y por más que al mirarte
Una sonrisa
A ti siempre te mostraba
En mi interior
Una tristeza ocultaba.
Pues ahora, gracias a esto
Con el tiempo fui comprendiendo
Que amar en silencio
Es un gran tormento.