Autora: Lea Nieves Torres
Pseudónimo: Vanessa Tawer
País: Colombia
Título: Guaimaral y Zulima
Hace mucho, mucho tiempo, en la tierra Motilonia, situada al Norte del Reino del mismo nombre, vivía una Princesa llamada Zulima. Su madre era la Reina Yirama y su padre el Rey Baritara.
Zulima era muy hermosa. Su cabello, negrísimo, lacio y tan brillante , que parecía suavizado con aceite de los dioses. Sus pestañas negrísimas, al igual que el arco de las cejas, semejaban el aleteo del más bello de los pàjaros negros. Su piel, cobriza y suave, semejante al pétalo de un nenúfar, atraía con su aroma y encantó todas las miradas y suspiros de los jóvenes guerreros y cazadores de su tribu y de las tribus vecinas que soñaban ser sus consortes, entre ellos un Príncipe llamado Gusimaral, hijo del Rey Chitará y de la Reina Kira.
Todos los Reyes, Reinas y sus tribus, amaban y cuidaban el Medioambiente con su tierra verde, sus aguas cristalinas y azules, representadas por sus grandes ríos y mares; su aire puro y su cielo azul, dónde la lluvia y el viento ayudaban a refrescar la tierra y a conservar la vida de la Gran Selva y sus hijos: tigres, leopardos, lobos, gatos Montes, osos de anteojos, grandes tortugas, caimanes, erizos, anacondas, serpientes multicolores, aves diversas como cóndores, guacamayas, loros, mirlos guacharacos, mochuelos, en fin...
A Zulima y Guaimaral, al igual que sus ancestros, no les era indiferente la Pachamama y por ello, aunque eran adolescentes, lideraban el cuidado al Medioambiente.
Al llegar la luna llena, las tribus celebraban su advenimiento con rituales ancestrales, dónde tomaban el víno hecho de maíz y consumían frutos originarios de estás tierras, intercambiaban artesanías, saberes, arte, danza y demás Expresiones Culturales, durante siete días y siete noches...Así se enamoraron,pero como eran muy jóvenes, debían esperar muchas lunas, para que los Reyes y Reinas dieran su autorización para la boda...
Y así fue: se casaron en uno de los rituales de siete días, después de ser sometidos a afeites, perfumes, elíxires, rituales propios de sus tribus. Los dos se amaban y respetaban tanto como a la Pachamama...
Un día, la luna y el sol se ennegrecieron; el cielo se llenó de nubes grises y después... después llegaron los invasores, llegaron vestidos de hierro, destruyendo todo a su paso ...
Gusimaral y Zulima, juntos, lucharon a muerte para salvar sus tribus, su raza y su Cultura...
Cuentan, que juntos, tomados de la mano, sus fantasmas recorren la otrora Selva del Catatumbo, el esqueleto de sus ríos y la fría Selva de Cemento de la Ciudad, dónde, en el futuro, alguien tuvo la idea de que ellos, Guaimaral y Zulima, son solo dos estatuas...pero sus espítitus saben que la lucha aún no ha terminado...
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