Fran Illanes

VOLTEAD A VERME, QUE EXISTO

Salid de la rutina

deteneos un momento

a contemplar la belleza del universo

fijaos vuestros ojos

en los alrededores

descubrís las infinidades

maneras de mostrarse del átomo.

 

Oíd la bulla alardeante

que trae el amanecer de la primavera

escuchad la algarabía

de los seres

que en pocas veces

nos damos cuenta de su existencia

y la estabilidad que trae

a nuestra madre tierra.

 

Tomaos un momento

de vuestro tiempo tan valioso

girá la cabeza

a donde raras veces

dirigimos la mirada

que los trajines del día a día

no los aparte

de la vida propia

que vale la pena vivirlo.

 

Poneis atención en el olor

de las rosas

que desprenden cada amanecer

al nacer el sol

de un nuevo día,

dejáos de absorber

el humo y la bulla de la ciudad

quien con gran decencia

trae cambios

el peor de todos

el deterioro del medio ambiente.

 

Salid al encuentro de nuestro planeta

los gusanos del mundo

volteéis a vernos

a preguntar

qué es lo que sucede

que no sabemos cuidar de nuestra casa

el agua se nos va, como la vida nuestra.

 

Dejaos a un lado

los que haceres del día

apartaos por un momento

de la rutina

al cual brindamos mucha importancia

salid y miraos

la desgracia que venimos causando

por perseguir lingotes de prosperidad.

 

Mirad la otra cara de la moneda

con tanta magnificencia

muestra las maravillas del universo

que pasamos desapercibidos

de su existencia.

 

Miradme

la vida se encuentra en mí

dejaos que de sombra

a los matorrales marchitas de sed

sed de justicia

sed de misericordia.