El viejo que voy a ser
espera afuera .
Con los ojos cansados
la mirada dormida.
Con muchos sueños
carcomidos y
proyectos frustrados,
al borde del camino.
Junto a el envejece
la puerta y
todo lo que toca.
En su postrer hora
va tocando corazones ,
esperando que alguno
lo guarde en su latido,
porque siente que
el abandono acompaña
su gemido.
No te abrirán viejo ,
la parca susurra en
sus oídos sordos,
entra mejor aquí
a morar conmigo .
Siente el gélido frío
que hay en mi aposento.
Ya no te queda nada ,
ya lo acabaste todo,
juventud, belleza , ni
dinero , ni poder .
El amor , hace cuanto
que cuiteo.
Para que proseguir ,
lo que viene es
previsible.
El que lea este escrito
que lo complete .