Anhelos tengo de verte, vida mía,
En las noches sin luna, en el alba fría,
En el eco del viento y en el río que fluye,
Mis pensamientos hacia ti siempre se insinúan.
Tu imagen, como estrella en el firmamento,
Ilumina mis sueños en este tormento,
Y en la distancia que nos separa, amor,
Persisten mis anhelos con fervor.
En las hojas que caen en otoño sereno,
En el susurro del mar, en su eterno vaivén,
Tus recuerdos acuden, dulces como el rocío,
Y mi corazón suspira en desvarío.
Los días pasan lentos sin tu presencia,
Y mi alma se sume en profunda ausencia,
Pero sé que algún día, vida mía, volveré,
A tu lado, en tus brazos, donde pertenezco, lo sé.
Hasta entonces, en esta nostalgia persistente,
Mi amor por ti, eterno, sigue siendo ardiente,
En cada verso que escribo, en cada suspiro,
Anhelo el momento de volver a tu abrigo.
En el rincón de mi corazón, siempre te espero,
Con la esperanza de un reencuentro sincero,
Porque anhelos tengo de verte, vida mía,
Y en ese encuentro, hallaré la dicha y la alegría.
Autor: Ángel R. Anaya Puerta
El Ángel de los sueños
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