Leinad Odnan

Las musas se fueron

 

Las musas se fueron

 

Despierto pero sin poder, ni siquiera, 

levantarme de la cama, 

pienso en mi falta de inspiración.

 

Una pequeña contribución en varias ramas,

un gran paso para mí.

De pronto pierdo toda motivación, 

ya nada me da satisfacción, 

excepto algún vicio por ahí 

que tal vez aceleró este proceso.

 

Pienso que tengo que 

tomar una actitud de acción, 

porque necesito … esperar, 

necesito paciencia, 

pero no es una paciencia  

en el que solo esperas quieto 

y en algún momento 

pasa los que buscabas, 

como una planta alógama 

que espera el polen de otra. 

Sino que tienes que iterar, 

probar constantemente, 

como regar una planta 

y en algún momento crecerá.

 

Hay un componente importante 

que no necesariamente tiene que 

ser una llama de pasión descontrolada 

que prenda mi inspiración, 

basta con unos chispazos de emociones 

que me avisan por donde ir. 

Las emociones y la acción, 

como una estrella binaria.

 

Enfocarme en mi catarsis, 

hay tantas cosas que quisiera exteriorizar, 

pero necesito tomarme mi tiempo 

para escucharme, 

sacarlo fuera de mi mente, 

de mi subconsciente 

y de mi inconsciente,

necesito tiempo.