Gustavo Echegaray

Eternos

 

Cuando estoy solo,
no te recuerdo,
no es necesario, 
ya estás a mi lado. 
Hablamos bajito 
de lo que nos llena el alma,
de la estrella bonita
que nos mira de lo alto,
del naranjo erguido
que florece con encanto,
de la noche encendida 
que nos hechiza y calma.

Cuando estoy solo,
 yo no te espero, 
no es necesario, 
porque ya te tengo.
El tiempo no es  la recta
que nace del pasado 
dirigida hacia el futuro, 
el tiempo es  un orbe 
circular en cuyo centro
tú y yo somos uno
y así somos eternos.