Consecuencias del dolor.
Cuatro paredes donde vive el dolor,
tranquilidad te has vuelto una extraña,
felicidad forastera en el amor.
Ya es cotidiano, golpes en la mesa.
Adornan el blanco piso platos rotos,
agresiones al rostro ¡ cuánta rudeza !,
tatuajes negros llevan desamor.
Un testigo, el clavo observa desde el techo.
Trizadas macetas en caravana
escoltan flores marchitas
si existe el sol que irradia,
no ilumina estas cuatro paredes.
Días de alcohol, noches de horror,
gritos en silencio, nadie presta atención
Sexo por obligación, sexo sin amor,
ensangrentada lloras en el rincón
La risa de antaño, ya es un lujo,
¿Cuánta bajeza es posible soportar?
Si solo existen, surcos marcados en el rostro.
La sal ha lacerado tu piel…
Palabras asesinas: ¡ Maldita perra eres un gusano !.
El clavo te entiende es tu confidente,
tú eres su amiga, desde que te conoció
es una ayuda, para escapar de las lágrimas.
En la desesperanza, la noche es más oscura,
ángeles que sufren, el alma tortura,
abuso constante, sin fulgor de luz.
Trauma psicológico, heridas en el ser,
eclipsada la estrella, es difícil la cruz.
Abuso constante, tormento embalsama,
el dolor que en el interior se esconde,
en depresión y estrés, el corazón resiente.
Aislamiento cruel, en islas oculto,
bravucón, con sañas, alejas el tumulto,
tal injusticia es a puertas cerradas
en el infierno abuso, el alma resquebraja.
La vergüenza y culpa se mecen prostituidas,
dejando cicatrices las heridas maltrechas.
El aislamiento cederá ante la desunión,
encontrará apoyo, la ansiada liberación.
Haces una rosa, con un grueso cordón,
simulas un collar, con una canción de amor
Un golpe, una silla expulsada al frente,
quejidos, convulsiones, lágrimas carmesíes
un ser luminoso se extinguió, nos dejo
en un silencio frío, su alma se sumergió,
y el clavo solitario, aún sus penas lloró
un eco, olvidado en desalientos sin razón.
Elthan