Pilar Luna

UN SENTIMIENTO

Hablan los cuatro vientos,

traen nubes sin espinas

y un cristal sin aristas.

Necesito pensar sólo un segundo,

no me hacen falta

palabras encadenadas,

todo es más simple

en un camino de espuma

que se lleva el viento.

Me libero, como la poesía

en este Equinoccio de otoño.

El mundo continúa

con sus dos caras

y una decoración de papel.

Me regalas tu amistad

y una pulserita de coral

que huele a sal de plata

y a jazmines de la huerta,

y olvido todos los despropósitos,

se aleja la tristeza antigua

de un acorde desafinado,

una nota despistada

que sonríe continuamente.