OSCAR LUIS GUZMAN

SUS OJOS ©

Sus ojos son inquietos y serenos…

Ojos marrones y tiernos; de reflejos cristalinos,

con brillo de celofán;

de pirofórico género y de apacible ademán.

 

Óvalos circunferidos de perfecta geometría;

produce una fantasía

como la de un cuento Homérico.

Pero forman noche y día la perfecta simetría

de un semblante encantador.

 

El brillo es de su cara

que al ser común, la hacen rara

de belleza sin igual.

 

Mas, disímil a otros ojos

son sus ojos de charol,

que, al verlos,

Afrodita sintió celestial pavor.

 

Ojos como los de Psique,

quien a Eros conquistó…

Y yo, al igual que Eros,

sufro del mismo dolor.

Ojos como la esperanza

llenos de luz eternal.

 

Así es la luz de los ojos,

Donde habita su mirada;

ojos de mi bienamada.

 

¡Cerrados causan tristeza,

abiertos, gran alegría...!

Y no es paradoja o mito

¿Qué no de la misma boca

Sale de un soplo aire frío

y de un bostezo calor...?

 

*