La escritura no es dejar
huella,
sino borrarla.
—M. Blanchot
Estoy triste.
Acabo de arrancar de mí
un trozo de corazón, del lado izquierdo,
y me duele —la sangre borbotea
un poco, pero lo suficiente.
Sigo triste, aunque escribir
me alivia —las palabras
que estoy escribiendo lloran
en silencio, un poco, pero lo suficiente.
Seguiré triste.
Cuando ponga el punto y final
a este poema seguiré triste, y
cuando ponga el punto y final
al siguiente poema a este
seguiré triste, aunque solo un poco,
pero lo suficiente.
Estoy contento.
Sé que esto es temporal,
que son gajes del oficio de amar,
y que es vivir, porque,
si no me pasara es que no estoy viviendo.
La vida sigue, un poco, pero lo suficiente.