IAEM

NIÑEZ

Antes de madurar a su niñez conocen sus ansias y regalan la desnudez primera, al hombre que aprovecha la inocencia con la que piensan. Ellas olvidar que muchos tienen miel en la boca y un amargo pasado enrredado en la lenguita.
Suprema llama que escucharme asemeja el infierno con ganas y, el rostro esconder lo que el alma sorprender a los que la vean. Anhelo las ansias de olvidar escrito inmortalizado para partir al último viaje inesperado. Respiro hondo a fugas del pensamiento que quiera olvidar, realidad consiente rifan mi suerte de este puto mal pensar. Expreso lo que el mundo me da al poético que confío y considero, ya que él no apuñala mi oscuro pensar porque el sabrá que al oírme cantar se enterarán. (IAEM) Pero si no demuestro los secretos un tarde o temprano eso que se esconde se revelará. Sean decadas del suceso que el domo desprecio, sol ilumina rasgos con amor porque es vida que rencoroso corazón aún con dudas del paso decidió olvidarlo.