Aquella lluvia parecía más bien unas delgadas lágrimas del cielo por una tierra que se nos muere, se nos muere Gea y Urano lo sabía, y a Caos no le importaba. Se nos muere Gea y los dioses estaban en la suya viviendo en ella sin el menor cuidado.
Se nos muere Gea gritan a coro todos los bosques; mientras que las rocas hacen el bis.
Y mientras tanto Zeus desde lo alto dice melancólico a su madre: ya te iré a visitar uno de estos días.
Y mientras tanto Deméter cumple con las últimas voluntades de la madre de madres y hace prosperar las cosechas.
Después de todo las fuerzas de una madre siempre estás dispuestas para realizar sacrificios por el bienestar de sus hijos.
Se nos ha muerto Gea.